
Internet es un vasto vergel lleno de información, la puerta de acceso al mundo. Hoy en día cualquier persona puede conocer las noticias de su ciudad, su país o de un lugar distante a miles de kilómetros con sólo abrir el navegador y escribir una dirección o una búsqueda rápida. Sin embargo, tras el funcionamiento de esta compleja infraestructura existen todo tipo de tecnologías que es importante conocer, y una de ellas es de los servidores DNS.
¿Qué son los servidores DNS de Google y qué ventajas tienen?
Para empezar a hablar de qué es un servidor DNS, primero tenemos que hablar un poco de las direcciones de Internet. Cuando introducimos en el navegador una URL cualquiera, lo que hace el protocolo de la red es, a grandes rasgos, buscar en una base de datos una dirección IP que se corresponda con la URL que hemos introducido, mostrándonos la página web que queremos visitar. Esta dirección IP tiene el mismo formato que las que introducimos para configurar la red en el ordenador, es decir, números colocados en una serie tal que así:
XXX.YYY.ZZZ.AAA
Obviamente, como usuarios no disponemos de esas direcciones IP para introducirlas en el navegador, sólo unos nombres que son más fáciles de recordar. Pues bien, los servidores DNS convierten esos nombres en esas IP que se corresponden con las páginas web que queremos visitar. Esto ya lo comentamos aquí mismo cuando hablamos de cómo configurar los DNS.
Las operadoras telefónicas que suministran el servicio a los usuarios tienen sus propios DNS, pero se pueden cambiar por otros alternativos a mano en cualquier momento. Aquí entran en juego los DNS de Google, que muchos usuarios utilizan a día de hoy.
Cada operadora tiene su filtrado local dependiendo del país en el que ofrezca su servicio, y desde 2008 Google tiene sus propios servidores DNS gratuitos que permiten a cualquier persona conectarse a Internet sin pasar por el filtro de la operadora.
Ventajas de las DNS de Google
Utilizar los servidores DNS públicos ofrecidos por Google proporciona distintas ventajas a los usuarios que queremos revisar:
- En primer lugar, la velocidad de respuesta en las peticiones mejora, lo que mejora la navegación en sí misma. Es cierto que esto depende de nuestra ubicación, de la ubicación donde están los servidores de los ISP que proveen de conexión y de la red a la que estemos conectados. Pero optamos pro los servidores de Google, nos aseguramos usar equipos con la última tecnología disponible, estables y libres de posibles saturaciones en los servidores de nuestro ISP.
- La segunda gran ventaja está en la posibilidad de saltar censuras y prohibiciones de acceso a servicios y páginas web. Una medida habitual por parte de los ISP para bloquear el acceso a una página es el bloqueo de dominios a nivel de DNS, lo que se ha empelado anteriormente para capar el acceso a páginas de dudosa legalidad como The Piarte Bay. Con los DNS de Google nos saltamos este tipo de bloqueos.
Utilizar los DNS de Google en Android
Para utilizar los servidores DNS en la conexión de cualquier dispositivo Android lo tenemos muy fácil. Para empezar localiza el icono de acceso hasta los ajustes del dispositivo, el clásico icono con forma de rueda dentada. Lo podrás encontrar en tu cajón de apps, pero también es accesible a través de la ventana de notificaciones.

Debes entrar en las opciones relacionadas con la red Wi-Fi que habitualmente se muestran en la sección de Conexiones siempre en función de nuestra versión de sistema operativo o capa de personalización del fabricante.

Ahora accede al listado de redes inalámbricas disponibles.

Mantén pulsado durante unos segundos la entrada de la conexión Wi-Fi que está sutilizando en ese momento. Aparecerá un menú emergente y tendrás que tocar sobre la opción de modificar la conexión.

Es posible que en determinados supuestos debas acceder a opciones avanzadas si no son visibles, presta atención a los mensajes en pantalla.

Cambia la configuración de dirección IP desde el estado DHCP a Estático.

Al hacerlo, aparecerán los campos personalizados de DNS. En los campos DNS, 1 y DNS 2 escribimos lo siguiente:
8.8.8.8
8.8.4.4
Cuando hayas completado ambos cambios pulsa Guardar en la parte inferior de la ventana. Desde ese momento navegarás utilizado los DNS de Google.

Utilizar los DNS de Google en Windows

Para cambiar la configuración de los DNS en Windows —en nuestro caso Windows 10—, basta con hacer clic con el botón derecho del ratón encima del menú inicio y entrar en el Panel de Control. Ahí accedemos a Redes e Internet, donde pulsaremos en Centro de redes y recursos compartidos, para después entrar en Ver información básica de la red y configurar conexiones.
Una vez tengamos esa ventana abierta, en el apartado Ver las redes activas, a la derecha, veremos un apartado llamado Conexiones: Ethernet. Si clicamos en Ethernet abrirá una ventana mostrando información del estado de Internet, con tres botones: Propiedades, Deshabilitar y Diagnosticar. Pulsamos en Propiedades, que es el que nos interesa.
Se abrirá una nueva ventana. En ella tenemos que buscar la entrada Protocolo de Internet versión 4 (TCP/IPv4), y pulsamos de nuevo en Propiedades. veremos una ventana como esta:

En este caso particular tenemos una dirección IP fija asignada, y el ordenador no la obtiene de forma automática. Los servidores DNS están colocados manualmente ya con los de Google, con lo que si está marcada la opción de obtenerlos automáticamente desmárcala e introduce 8.8.8.8 en el DNS principal y 8.8.4.4 en el DNS alternativo. Después pulsa en Aceptar, volverás a la ventana que muestra las propiedades de Ethernet. Pulsa en Cerrar y tus nuevos DNS ya estarán listos para funcionar.
Configurar servidores DNS de Google en Mac OS X

Cambiar los servidores DNS en OS X es muy fácil. Para hacerlo sólo hay que abrir el panel de preferencias del sistema y entrar en el submenú Red. A continuación hay que seleccionar la tarjeta de red que vayamos a modificar y hacer clic en el botón Avanzado.
Se abrirá una ventana con distintas pestañas, de las cuales seleccionaremos DNS. Allí pulsamos en la cruz de la parte inferior izquierda y añadiremos los DNS de Google que comentamos en el apartado anterior.
Configurar los servidores DNS de Google en Linux
Como siempre suele ocurrir cuando hablamos de Linux, lo más sencillo en estos casos es cambiar los DNS a mano a través de la terminal. Para ello abrimos una e introducimos el siguiente comando:
sudo nano /etc/resolv.conf
En ese archivo tendrás que añadir las direcciones IP de los servidores DNS que desees. Puedes añadir tantos servidores DNS como quieras utilizando repetidamente el comando nameserver DIRECCION-IP. En este caso añadiremos los DNS de Google de la siguiente manera:
nameserver 8.8.8.8
nameserver 8.8.4.4
Por último reinicia las interfaces de red para aplicar los cambios con este comando:
sudo /etc/init.d/networking restart
Y con esto los DNS de Google quedarían configurados. Para asegurarnos de que todo funciona correctamente tendríamos que ejecutar este otro comando:
ping -c 4 192.168.1.1 (para comprobar conectividad con tu puerta de enlace, enviará y recibirá 4 paquetes antes de parar) ping -c 4 google.com (para comprobar conexión a Internet, también enviará y recibirá 4 paquetes antes de parar)
El comando debería devolvernos tiempos de respuesta medidos en milisegundos si todo ha ido bien.
Desde nuestra experiencia personal, vale la pena cambiar los DNS por los de Google. Es un proceso que no cuesta mucho tiempo y que, además de saltarse las restricciones de las operadoras, mejorará la velocidad de resolución de nombres de forma notable. Si quieres probar estos DNS anímate, ya tienes las herramientas necesarias para ello.