Descargar tus propios vídeos desde Instagram es muy sencillo gracias a herramientas como SnapTube. Para empezar, abre Instagram y copia el enlace público del vídeo. Para ello, pulsa en los tres puntos que encontrarás encima de la publicación.

En el listado de opciones que aparecerá, localiza la opción Copy Link y pulsa sobre ella.

Ahora, dirígete a SnapTube. Esta aplicación detecta los enlaces compatibles copiados en el portapapeles. Por eso, nada más acceder a ella, te ofrecerá descargar el enlace que acabas de copiar. Toca en el botón Download para seguir.

Acto seguido, toca en Start Download. Esto pondrá en marcha la descarga.

Ahora, el fichero multimedia se encuentra almacenado en tu dispositivo. Toca en el apartado My files para comprobarlo. Desde aquí, también es posible reproducir los vídeos descargados. Sin embargo, SnapTube te obligará a descargar un reproductor multimedia concreto.

Si prefieres no hacerlo, abre el explorador de archivos y navega hasta la carpeta Downloads, ubicada en el interior de snaptube. Desde ahí puedes abrir, copiar, mover o subir a la nube todos los archivos descargados.

Ten en cuenta que este proceso solo es válido para descargar aquellas publicaciones que contienen vídeo. En ningún caso sirve para bajar una historia o un Reel.
Antes de realizar una descarga, asegúrate que los términos y condiciones de Instagram lo permiten. En ocasiones, estas plataformas limitan la distribución de los archivos subidos a sus servidores, incluyendo aquellos que fueron creados y publicados por el propio usuario. Por otro lado, debes evitar guardar o distribuir contenido que se encuentre protegido por derechos de autor. De lo contrario, podrías estar violando las leyes de propiedad intelectual de tu país.