Las Bóvedas Malditas son un nexo argumental de la historia ya que se trata del principal misterio que nos encontraremos a lo largo del juego. El origen es confuso, ya que existen diferentes teorías sobre éstas y se remontan a antes de la creación de la escuela. Unos dicen que fueron los propios fundadores de la escuela las que las pusieron en Hogwarts y otros que un antiguo director de la escuela se volvió loco y decidió construirlas. Se cree que la bóveda final es la verdadera y que las otras cuatro bóvedas son solo trampas y señuelos, cada una de ellas con una maldición.
Bóveda de Hielo
La primera bóveda está ubicada al final de las escaleras secretas y se encuentra escondida por una pared en el quinto piso. Debido a su nombre, se encuentra cubierta de hielo y atacaba con un rayo a aquellos que intentaron tocarla. Un caballero de hielo ejercía como última defensa de la bóveda. Esta bóveda aparece después de que el hielo maldito, contenido de forma segura dentro de una habitación cerrada, se liberase por toda la estancia amenazando incluso a toda la escuela.
Bóveda de hielo
Bóveda del Miedo
Estaba escondida detrás de una sección prohibida de la biblioteca. Esta bóveda se adentra en los miedos más profundos de las personas. Se relaciona con los boggart, seres capaces de transformarse en aquello que más teme la persona que tiene enfrente. Había 3 boggarts en el interior que defendían la bóveda del miedo, que se parecía mucho a la bóveda de hielo. Fue investigada por un alumno llamado Jacob que fue expulsado por poner en riesgo a toda la escuela durante el proceso. Para abrir la bóveda se tenía que tocar la columna con una varita rota. Dentro había un mapa del bosque prohibido y una flecha rota.
La bóveda del miedo
Bóveda del Bosque
Se trata de la tercera bóveda, y fue encontrada por el hermano o hermana de Jacob y sus amigos durante el curso 1987/88. Estaba escondida en una arboleda del bosque prohibido. Su entrada estaba custodiada por una Acromántula, que puso su guarida allí para alimentar a los estudiantes sonámbulos. Para abrir la bóveda se tenía que tocar la columna con la flecha del centauro Torvus. En su interior estaba el retrato de un dragón y un pequeño suéter.
Bóveda de los Retratos
La bóveda de los retratos, la cuarta bóveda, fue explorada por Jacob, Patricia Rakepick y Peter Pettigrew. Su ubicación es un misterio pero se dice que está fuera de Hogwarts, probablemente bajo tierra. Durante el viaje, los tres se encontraron con el dragón que custodiaba la bóveda. Pettigrew escapó, dejando atrás a Rakepick y Jacob. Los dos lograron entrar en la bóveda gracias a la legeremancia de Jacob, pero no derrotaron al dragón. Al entrar, Jacob quedó atrapado dentro de un retrato mientras que Rakepick fue enviada al bosque prohibido.
Quinta bóveda
La quinta y última bóveda se encuentra en algún lugar fuera del castillo de Hogwarts, en el Lago Negro pero poco se sabe de ella y continúa siendo un misterio.
Acompañantes
Durante nuestra aventura, podremos escoger a nuestro acompañante para adentrarnos en las profundidades de la bóveda y poder investigarla un poco más seguros, junto con otros amigos que, automáticamente, por defecto nos acompañarán para seguir con nosotros:
- Bóveda de hielo: Nos acompañará Bill Wesley y por defecto pueden venir, Rowan Khanna, Ben Copper o Penny Haywood
- Bóveda del miedo: Nuestros acompañantes serán Tulip Karasu y Barnaby Lee y por defecto Rowan Khanna, Nymphadora Tonks o Bill Weasley
- Bóveda del bosque: Aquí tendremos la posibilidad de escoger a Charlie Weasley, Torvus y Rubeus Hagrid y como acompañantes por defecto pueden venir Penny Haywood, Bill Weasley o Rowan Khanna
- Bóveda de los retratos: En esta aventura vendrán con nosotros Ben Copper, Bill Weasley, Mérula Snyde y Patricia Rakepick además de Penny Haywood o Charlie Weasley que vendrán por defecto