Prácticamente desde el comienzo de la informática de consumo y de su popularización ha existido el software privado de pago y el software libre, abierto y gratuito. Es totalmente comprensible que una empresa quiera cobrar por un programa que ha desarrollado, al igual que tú pagas por un ordenador al comprarlo. Pero no todo el mundo está dispuesto a pagar o aceptar las condiciones de uso que se requieren a la hora de utilizar software privado, por eso surgió todo el movimiento del software libre. Hoy en día podemos encontrar una versión gratuita para casi cualquier tipo de programa con el que necesitemos trabajar en nuestro ordenador, desde editores de imágenes hasta suites ofimáticas, el tema que nos atañe en este artículo.

Aunque a día de hoy Google es la mayor competencia de Microsoft Office, OpenOffice también se ha ganado por méritos propios ese derecho a ser considerado una competencia directa. Es una suite de ofimática completamente gratuita y de código abierto que ha sido durante años la favorita de todos los usuarios amantes del software libre y sistemas basados en Linux. La historia de OpenOffice es digna de contarla, haciendo un repaso por todas las etapas (y manos) por las que ha pasado y por la cantidad de problemas que ha sufrido.

Viaje a los orígenes: ¿quién creó OpenOffice y cuándo?

Probablemente te estés preguntando en qué momento alguien decide hacer una suite de ofimática para distribuirla de manera gratuita y sin intención de cobrar por ello. ¿Dónde está el beneficio y el negocio de lanzar un programa gratuito?

StarDivision, los padres de OpenOffice

En el año 1984 el alemán Marco Börries fundó la empresa alemana StarDivision, inspirado por el éxito de empresas americanas como Microsoft. En StarDivision se desarrolló el procesador de textos StarWriter, el cual podríamos decir que es el padre de OpenOffice Writer. StarWriter se publicó inicialmente para el Zilog Z80 (un microprocesador de 8 bits que aunque se lanzó al mercado en 1976, no se popularizó hasta los años 80), posteriormente para ordenadores Amstrad CPC y un año después para MS-DOS 3.2.

En 1992 se lanzó la primera versión del que sería su paquete de ofimática bautizado como StarOffice 1.0 para MS-DOS. En 1994 se publicó StarOffice 2.0, formado por tres programas: StarWriter, StarCalc y StarBase. Inicialmente llegó únicamente para Windows 3.1. Con StarOffice 3.0 en 1995 llegó el soporte para más sistemas operativos: DOS, OS/2, Solaris SPARC y Macintosh.

La versión 3.0 de StarOffice llegó en 1995, y se añadieron más programas al pack: StarDraw, StarImage y StarChart, además de los que ya venían con la versión 2.0. Apenas un año después, en 1996, se añadió el soporte para Linux, logrando ser la suite de ofimática que estaba disponible para la mayor variedad de sistemas operativos.

Sun Microsystems se interesa por StarOffice

La prestigiosa empresa norteamericana tenía su propio sistema operativo con el que trabajaban a diario la mayoría de sus trabajadores, llamado en un principio como SunOS y renombrándose a Solaris posteriormente. El principal problema de Sun era que se veían obligados a disponer de ordenadores con Windows para poder hacer uso de Microsoft Office. Sun se negaba a dar la espalda a su sistema operativo y además pagar miles de licencias de Office para todos sus trabajadores.

Fue entonces cuando apareció en su punto de mira StarDivision, la empresa que se había encargado de crear una suite de ofimática con soporte para SunOS/Solaris además de otros sistemas operativos como hemos visto. En 1992 Andreas von Bechtolsheim, co-fundador de Sun Microsystems, había comprado un 20% de StarDivision, y desde 1997 Sun había estado proporcionando estaciones de trabajo con Solaris para los empleados de StarDivision, por lo que existía una relación previa.

La web de StarDivision en 1997, se anunciaba el acuerdo de colaboración con SunLa web de StarDivision en 1997, se anunciaba el acuerdo de colaboración con Sun

En 1999 con la llegada de StarOffice 5.0, Sun Microsystems decidió dar el paso y comprar StarDivision por 73,5 millones de dólares. En un principio la idea era hacer de StarOffice una suite de ofimática distribuida por Internet, pero cuando explotó la burbuja .com cambiaron sus planes. Fue entonces, en el año 2000, cuando se liberó el código de StarOffice 5.2 con el anuncio de la creación de OpenOffice.org. De esta forma, dejaban a la comunidad la posibilidad de desarrollar su propia suite de ofimática al igual que habían se estaba haciendo por aquel entonces con Linux.

La web de OpenOffice.org anunciando el comienzo del proyecto de código libreLa web de OpenOffice.org anunciando el comienzo del proyecto de código libre

Durante varios años coexistieron la versión de OpenOffice.org con la versión de StarOffice que utilizaba Sun en sus equipos. Sin embargo, era la versión de código abierto, la primera, la que innovaba en mayor medida gracias al trabajo de toda la comunidad, aunque Sun era la principal beneficiada ya que eran los propietarios de todo el proyecto de OpenOffice.

Desde la versión 1.0 de OpenOffice, que contaba con la impresionante cifra de 7,5 millones de líneas de código, ya se daba soporte al formato de documentos abiertos OpenDocument XML. OpenOffice.org se esforzaba en dar soporte a todos los formatos de documentos posible, incluido el de Office. Sin embargo Microsoft no fue capaz o no quiso añadir soporte para leer documentos de OpenOffice hasta la versión 2007 SP2.

Pantalla de instalación de OpenOffice 1.0.3Pantalla de instalación de OpenOffice 1.0.3

La respuesta por parte de los usuarios no pudo ser mejor: para el año 2003 se habían alcanzado 20 millones de descargas, se daba soporte para 110 idiomas y se podía utilizar en ordenadores con Windows, Macintosh y Linux. En 2004 quedó patente su relevancia al lograr una cuota de uso del 14% en grandes empresas.

Del éxito al olvido: comienzan los problemas para OpenOffice

Todo parecía ir genial, la cantidad de usuarios subía a un ritmo considerable y con la llegada de la versión 2.0 OpenOffice.org se hizo aún más compatible con los documentos de Microsoft Office, que seguía siendo la suite de ofimática más famosa y utilizada. Pero las tensiones entre la comunidad y Sun iban en aumento, ya que los primeros se encargaban de dar gran parte de la vida al proyecto mientras que Sun simplemente se beneficiaba de ello.

Pantalla de carga de OpenOffice 2Pantalla de carga de OpenOffice 2

Recordemos que Sun seguía siendo la propietaria y que sólo aportaba el 30% del código. Además, la comunidad sentía que no podía ofrecer innovaciones al ritmo que deseaba ya que Sun limitaba seguir adelante con su proyecto de código abierto. Fue entonces cuando comenzaron a aparecer forks que se basaban en el código de OpenOffice como IBM Lotus Symphony o Go OpenOffice llevado a cabo por Novell.

Interfaz de Lotus Symphony, el fork de OpenOffice de IBMInterfaz de Lotus Symphony, el fork de OpenOffice de IBM

En el año 2008 se publicó la versión 3.0 que incluía un gran número de novedades y una actualización de la interfaz. Sin embargo, las cosas económicamente no iban bien para Sun, y surgieron rumores sobre varias empresas que se planteaban su compra. Finalmente, el 20 de abril de 2009, Oracle hizo oficial la adquisición de Sun Microsystems por 7.400 millones de dólares.

Oracle: la desatención que desemboca en la creación de LibreOffice

Durante los años 2010 y 2011 Oracle apenas tuvo interés por mantener vivo el proyecto, aunque se publicaron actualizaciones para la versión 3.0. Los cambios que se realizaron tras la compra de Sun, como el cambio de nombre por Oracle OpenOffice y una drástica reducción de los desarrolladores asignados al proyecto, hicieron que en enero de 2011 The Document Foundation (TDF), una organización creada el 28 de septiembre de 2010 por varios miembros de la comunidad de OpenOffice.org con el fin de poder desarrollar una suite de ofimática alternativa que no tuviera ningún requisito de asignación de derechos de autor, anunció la creación de LibreOffice, la nueva suite de ofimática libre que contaba con el apoyo de grandes empresas como Novell, RedHat, Canonical, Google o IBM.

En un principio el nombre de LibreOffice era temporal, ya que Oracle fue invitada también a ser miembro del TDF a la vez que se solicitaba donar la marca OpenOffice.org. Sin embargo, Oracle no sólo no apoyó a la organización, sino que exigió a varios miembros que formaban parte de la comunidad de OpenOffice.org y del TDF que se retiraran de este último, alegando que suponía un conflicto de intereses ya que querían que el consejo de la comunidad estuviera formado exclusivamente por trabajadores de Oracle.

La recién inaugurada web de LibreOffice en el año 2011La recién inaugurada web de LibreOffice en el año 2011

LibreOffice supuso una renovación completa del proyecto de OpenOffice. al depender exclusivamente de la comunidad para su desarrollo y ser completamente independiente, se pudo avanzar en su desarrollo como nunca antes había sido posible por los controles que ejercían Sun y Oracle. En la versión 3.4 se hicieron gran cantidad de cambios en el código que ayudaron a optimizar su funcionamiento y reducir la dependencia de Java, algo criticado duramente en los últimos años durante la gestión de Sun Microsystems.

Apache toma las riendas de OpenOffice

Oracle se cansó de aguantar la carga que suponía mantener OpenOffice y tras deshacerse de los pocos miembros de StarDivision que seguían aún en la empresa, decidió donar en junio de 2011 la suite a la Incubadora de Apache, la cual en diciembre del mismo año anunciaba que el nombre del proyecto pasaría a ser Apache OpenOffice. Sin embargo, aunque Apache y el TDF tuvieron conversaciones, la idea inicial de fusionar LibreOffice con OpenOffice no pudo llevarse a cabo al estar la segunda bajo licencia de Apache y existir varias opiniones contrarias sobre cómo debería afrontarse el proyecto conjunto.

Interfaz de NeoOffice Calc y Writer, las alternativas a Excel y WordInterfaz de NeoOffice Calc y Writer, las alternativas a Excel y Word

No podemos olvidarnos de NeoOffice, otro fork que surgió de OpenOffice.org exclusivo de OS X. Como las versiones anteriores a la 3.0 no disponían de una interfaz nativa para OS X, era necesario utilizar un framework gráfico como X11.app o XDarwin. Planamesa Software es la empresa responsable de NeoOffice, el cual aunque esté basado en la famosa suite libre y gratuita, es un software de pago. Ofrecía un gran número de ventajas con respecto a la competencia: una experiencia de usuario nativa para OS X, instalación mucho más sencilla, integración con el sistema, uso de las fuentes y servicios de impresión nativos sin necesidad de configuración adicional y soporte para el portapapeles. En la actualidad NeoOffice va por su versión 4.4 publicada en agosto de 2017, la primera versión que se basa en el código de LibreOffice en lugar de OpenOffice. Se puede adquirir una licencia desde la Mac AppStore, aunque su código fuente sigue siendo público.

El futuro de OpenOffice: ¿qué esperar para los próximos años?

En la actualidad LibreOffice sigue recibiendo actualizaciones y tiene el apoyo de un gran número de distribuciones Linux como Ubuntu. Por el contrario, OpenOffice sobrevive con dificultad gracias al trabajo de voluntarios y en gran medida su desarrollo se encuentra estancado. En septiembre de 2016 Dennis E. Hamiton, Vicepresidente de Apache OpenOffice, publicó una carta abierta donde incluso llegaba a plantear el posible cierre del proyecto:

(Apache OpenOffice) tiene una capacidad limitada para mantener el proyecto de una manera activa. En mi opinión considero que no hay suficientes desarrolladores que tengan el conocimiento, capacidad y voluntad para llevarlo a cabo junto a la media docena de voluntarios. No importa cuáles sean las razones de esta situación.

Actualmente están trabajando bajo mínimos y no disponen de gente suficiente para poder seguir desarrollando OpenOffice al ritmo que se merece un proyecto de este calibre. No se llega a confirmar que vayan a cerrarlo, pero es una posibilidad que tienen en mente si la situación no mejora. Lo cual es bastante improbable que suceda a la vista de la buena salud y apoyo que recibe LibreOffice actualmente.

Debido al sistema de licencias que tiene cada proyecto, las novedades que han aparecido en OpenOffice han podido ser portadas sin problema a LibreOffice, pero las novedades que se implementan en LibreOffice no pueden llevarse a OpenOffice con tanta facilidad. Un ejemplo de esto es la barra lateral, la cual se creó para OpenOffice, pero poco después se incorporó en LibreOffice como una característica experimental.

Para complicar aún más la situación de OpenOffice, los tiempos cambian, y ahora vemos como cada vez más el usuario da prioridad a editar documentos en la nube o de manera colaborativa. La popularización de Office Online o Google Docs, servicios gratuitos y a los que cualquier usuario sin importar el sistema operativo que utilice en su equipo puede acceder, hacen que el futuro pinte cada vez peor para OpenOffice.

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